Historia Empresarial
Esta es la cronología de una organización que comienza siendo pequeña y que, gracias a su compromiso, dedicación y capital humano, llega a ser la compañía de ingeniería eléctrica y mecánica de montajes más grande de Colombia y uno de los actores más importantes en el desarrollo de infraestructura de América Latina y el Caribe.
Como estudiantes de bachillerato, Carlos Schrader y Sergio Camargo se conocen y comparten su pasión por la ingeniería. Años después, Carlos estudia su carrera en la Universidad de Texas y Sergio en el Rensselaer Polytechnic Institute RPI de Nueva York.
El 28 de febrero de 1963 y siendo ya profesionales, Carlos Schrader y Sergio Camargo unen sus ideas de proyectos y fundan la compañía a la luz de sus apellidos: Schrader Camargo Ingenieros.
En 1964 se hacen socios de la empresa los ingenieros eléctricos Luis Alberto Camargo Torres, hermano de Sergio, graduado en la Universidad de Kentucky, y José Joaquín Pico Patiño, de la Universidad Industrial de Santander, UIS. A ellos se suma por un tiempo el italiano Ferdinando Giroli.
Pero la historia no para allí. En 1965, la Empresa de Energía Eléctrica de Bogotá (EEEB), contrata a Schrader Camargo para realizar el montaje electromecánico de una estación de bombeo reversible de cabeza variable en el municipio de Sesquilé.
A partir de esa exitosa experiencia inicial, dos años después, en 1967, Schrader Camargo construye sus propias oficinas. Por esa época proyecta las instalaciones mecánicas y eléctricas de la subestación de la refinería de Barrancabermeja para Ecopetrol y, tiempo después, el contrato con Acerías Paz del Río le permite sumar una obra imponente dentro de su amplia experiencia. Luego de esas circunstancias, la empresa queda a cargo de la construcción de varias centrales hidroeléctricas de la EEEB.
En 1970, Schrader Camargo se internacionaliza y se involucra en la construcción de imponentes obras de infraestructura en Panamá, entre ellas varias centrales hidroeléctricas y plantas de cemento. A lo largo de esta década, la compañía trabaja con fortaleza en diversos proyectos localizados en territorio colombiano como Barrancabermeja, La Guajira y Cundinamarca, departamento en el que desarrolla el proyecto hidroeléctrico Mesitas del Colegio para la EEEB. Con la gestión de las plantas de etileno y polietileno en Barrancabermeja, la empresa fortalece su relación con Ecopetrol a finales de la década de 1970.
En la década de los ochenta, Schrader Camargo se adapta a nuevas dinámicas y transforma parcialmente su filosofía y estructura para atender los tiempos de planeación y ejecución del sector petrolero, en pleno boom de la industria en Colombia. A partir de allí, este sector se convierte en su mayor cliente.
Los ochenta fueron el escenario perfecto para que Schrader Camargo ampliara su influencia internacional en el sector eléctrico a través de un contrato con Inecel de Ecuador, ejecutando los trabajos de las subestaciones Machala, Posorja, Milagros y Santa Helena. Al mismo tiempo, mantiene operaciones en Guatemala y Honduras; en Perú consolida su gestión a nivel hidroeléctrico; y en Belice desarrolla un ambicioso complejo hotelero.
Asimismo, en Colombia logra cerrar la década de los años ochenta con un proyecto civil importante para El Cerrejón, al cual se suma la ampliación de una planta de la empresa Enka y el montaje electromecánico de la central diésel de Leticia, en Amazonas.
En la década de los noventa la expansión de la compañía continúa con la ampliación de las subestaciones eléctricas de Sabanalarga y Chinú para ISA; la construcción de una planta de cemento en Panamá; y el desarrollo de unas Termopascuales en Ecuador. No obstante, a nivel interno se consolida la estrategia de comprar y crear compañías que complementan la gestión general, lo que permite que, para inicios de la década, Schrader Camargo cuente con más de seis gerencias y con una poderosa infraestructura administrativa.
Vale la pena destacar que en la segunda mitad de la década de los noventa, la gestión de sistemas de la compañía se tecnifica con software especializado en el control de obras, plataformas de correo, herramientas de comunicación virtual y programas contables, estrategia que enriquece la operación general.
La empresa, además, se involucra en la construcción de una planta de generación de energía en Jamaica, donde sitúa una filial propia. Asimismo, adelanta obras en Venezuela, República Dominicana y Trinidad y Tobago, al tiempo que desarrolla más proyectos en Perú y trabaja en consorcios en Brasil. A nivel nacional, desarrolla proyectos en Sogamoso y Cali, para compañías reconocidas como Cerromatoso y Ecopetrol.
Partiendo de su potencial endógeno, Schrader Camargo Ingenieros Asociados da un salto cualitativo y cuantitativo para garantizar su evolución, y lo hace buscando una nueva estructura organizacional y a un aliado fuerte y sólido como el grupo Xignux.
Bajo ese entendido, el año 2008 trae consigo una negociación que se desarrolla en un marco cordial y fluido. Schrader Camargo demuestra ser una empresa de gran potencial, acorde con los estándares de Xignux, organización que a su vez muestra sus credenciales y una visión del negocio que cumple con las expectativas de socios y directivos. Para enero de 2009, Schrader Camargo ya es parte de la importante red empresarial de Xignux.
Grupo Xignux, hasta entonces único accionista de SCIA, decide vender el total de la compañía por medio de managment buy out perfeccionado en el año 2020, por lo que nuevamente SCIA vuelve a ser una compañía 100% colombiana.
En años posteriores la evolución no cesa. En 2013, la compañía cumple cincuenta años de trayectoria, evidenciando un impacto profundo en la economía de Colombia y en sus colaboradores. La innovación, corazón de la gestión empresarial, hace que el deseo innato por encontrar nuevas maneras de hacer las cosas a la hora de generar bienestar para clientes y usuarios sea el motor para superar los retos técnicos.
Así las cosas, para 2015 Schrader Camargo visualiza en el capital humano su principal activo y eje de excelencia y, en los aportes a este, su principal legado. Los clientes, colaboradores y demás grupos de interés de la compañía lo confirman y lo evidencian hoy.
En el último año triplicamos nuestro equipo de trabajo. Actualmente, contamos con más de 350 colaboradores que dedican todo su talento en la ejecución de proyectos que le aportan a la prosperidad del país por el cual, seguimos creciendo y generando más empleos.
Vemos el futuro con seguridad y optimismo convencidos de que la confianza que hemos cultivado con nuestros grupos de interés es el activo y diferenciador más importante de la compañía, que nos permite ser un actor referente para el sector.
Para el 2025 le apostamos a ser la empresa colombiana con la mayor participación en el mercado de construcción, montaje de infraestructura y obras civiles en proyectos industriales. Además, trazamos una hoja de ruta para incursionar en los segmentos de generación de energía convencional y renovables, manteniendo presencia en el sector de Oil & gas, energía, minería e infraestructura. Este es nuestro compromiso con el país: contribuir a su crecimiento y prosperidad desde lo que hacemos.